El gobierno de Siria estuvo involucrado en numerosos crímenes contra la humanidaddurante la represión de las protestas antigubernamentales, según apuntó hoy una comisión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
En el informe, los expertos en derechos humanos denunciaron la detención general arbitraria de manifstantes así como torturas y violaciones de prisioneros. Además, se dieron órdenes concretas para disparar y se apuntó deliberadamente a menores de edad.
"El alcance y reiteración de los ataques de los militares y las fuerzas de seguridad contra los civiles y barrios civiles y la destrucción generalizada de la propiedad sólo pudo ser posible con la aprobación o complicidad del Estado", apunta el estudio.
Los expertos reclamaron al Consejo de Derechos Humanos que adopten "pasos urgentes" para involucrar al Consejo de Seguridad de la ONU y poner fin a estas violaciones.
"La comisión está muy preocupada por qué se hayan cometido crímenes contra la humanidad en diferentes lugares de (...) Siria durante el periodo revisado", apunta el texto.
Los tres miembros de la comisión que dirige el politólogo brasileño Paulo Sérgio Pinheiroentrevistaron a más de 200 víctimas y testigos. El gobierno de Bashar al Assad no les permitió entrar en Siria.
